Hablar
del binomio artístico Estefanía de los Santos –actriz– y Pablo
Messiez –dramaturgo y director– es sinónimo de grandeza escénica, y
así lo demuestran en esta deliciosa pieza teatral nominada Las
plantas.
El
año pasado tuvieron ocasión de demostrar su virtuosismo teatral
con esta obra en el Festival Fringe y ahora han vuelto a un
pequeño espacio de la Sociedad Cervantina (C/Atocha, 87)porque su propuesta es para salones de alto teatro, con el público
sintiendo la cercanía de lo que Estefanía cuenta a través del
poético y también cotidiano texto que ha escrito Pablo para
hablarnos de la soledad, de la grandeza de vivir, de la dualidad, del
amor, de la pasión, de la fragilidad o de la pasión de estar vivos.
Un
monologo donde nos convertimos en voayeurs de un personaje
que siente una pena que le convierte en un ser muy vivo en
consonancia con sus plantas, que cobran personalidad gracias a
sus palabras; un monologo que estructuralmente se rompe a la mitad
para hablarnos cara a cara de lo que ella es y por qué lo es, lo que
la convierte en un ser que busca el amor, que teme, que llora o se
ríe en el mismo acto de magnifica interpretación. Recalcamos «magnifica interpretación».
Este
acto artístico deja huella en el espectador, en especial cuando
Estefanía nos presenta con una calidez corporal y sensitiva, digna
de una diva popular y grandiosa, lo que ella aprecia en una canción
de Nina Simone. Una escena que no podremos olvidar: a Estefanía en
el papel de Alicia conjugando sus manos con las de la «negra
bella» tocando el piano, o su voz relatando la fortaleza vocal y
de alma de esta grande del soul. La transformación de Alicia y Nina
Simone, al unísono, en el canto a la libertad de todos los seres
humanos.
Esta
representación termina su andadura el domingo 21 en la Sociedad
Cervantina, pero no queríamos dejar de reseñar nuestra alabanza a
lo que vimos. Quizá vuelvan. Ojalá. Si ven próximamente un anuncio
teatral de Las plantas, no duden en sentarse entre los
espectadores para apreciar el buen teatro.
De
todos modos, Pablo Messiez, un encantador de espectadores como lo
describió Veronese, volverá a dirigir a Estefanía en un próximo
proyecto, junto con otras grandes actrices y actores, porque Pablo
elige muy bien a quienes narran su particular universo, como ya lo
hizo en Ahora, Los ojos y su adaptación de Las
criadas de Genet.
Cuando
encuentren en cartel estos nombres tengan seguro que disfrutaran de
calidad y calidez teatral universal.
Dirección
y Dramaturgia: Pablo Messiez
Actriz:
Estefanía de los Santos
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